Frío el corazón,
el alma muda.
No quedan lágrimas
ni llanto, ni dolor.
Sólo preguntas:
¿qué haré conmigo
ahora? ¿Dónde está
el sentido, la verdad?
¿Dónde estás tú?
Te hice daño.
Y la vergüenza
me ha tomado
de la mano,
sacándome
con gesto infantil,
su lengua azul
JC